Vivir la vida.

¿Te has preguntado por qué hay días en los cuales el tiempo se nos pasa sin darnos cuenta y en los que sentimos que no hemos hecho todo lo que queríamos?

¿Te has sentido viviendo en ¨piloto automático¨ sin tomar el verdadero control de lo que haces?

En uno de esos días en los cuales el estrés solía subir a niveles críticos debido a toda la presión del trabajo, me sucedió que llegando a casa tarde en la noche, me encontré abriendo la puerta del carro sin haberme dado cuenta en qué momento había conducido desde la oficina. Era un viaje de 17 minutos sin tráfico y en esa casi madrugada no quedaban muchos autos en la calle. Me detuve por un minuto y me quedé sentado en la silla mientras trataba de recordar lo que había hecho para llegar a casa: las curvas que tomé, los semáforos en los que debí haberme detenido y las personas que deben haberme visto sin que yo me percatara que existían. Definitivamente tuve que haber visto todo pero  no me detuve a observar.

Sentí pánico por unos instantes pero esa experiencia me sirvió para entender que en la vida nada de lo que uno no se detenga a observar, cobra relevancia, por lo tanto, si nos pasamos la vida en piloto automático, jamás podremos concluir que hicimos con ella o en ella.

En estos tiempos cuando decimos que el tiempo vuela o que no nos alcanza, nos pasamos las horas enfrascados en pequeños detalles, cerrando pendientes irrelevantes y ocupándonos con el objetivo de no sentir que no hacemos nada, pero la realidad es que no estamos haciendo todo lo que deberíamos hacer por nosotros.

Así cómo yo conduje sin darme cuenta, así mismo muchos de nosotros dejamos pasar la vida sin dedicarnos a vivirla. Sucede que encontramos varias excusas:

  1. Vivimos lo sueños de los demás
  2. Nos encerramos en el trabajo
  3. Esperamos la oportunidad que nos vuelva millonarios
  4. Nos da miedo arriesgar

Es importante vivir la vida con intensidad, con pasión, dando todo de sí mismos. Todo lo que hagamos a medias no dará frutos, todo lo que hagamos con toda nuestra energía, redundará necesariamente en cosas maravillosas.

Hay algo en lo que creo totalmente: a veces uno tiene que perderse para encontrarse. Tiene que estar sin trabajo para retomar ese proyecto para el que nunca tuvo tiempo;  tiene que dejar una relación complicada para vivir una que lo llene, a veces uno tiene que dejar de decir que tiene un millón de cosas por hacer y dedicarse a hacer aquellas que son realmente importantes. A veces uno tiene que dejar de hacer las cosas en las que se es bueno, para dedicarse a hacer aquellas en las que se es realmente excelente.

Tengo muchas personas a mi lado  que hoy son los mejores en lo que hacen, que emprenden sus propias empresas, que crean aplicaciones, que son líderes en ventas, que enseñan, que crecen, que se superan, que se hacen más fuertes, que viven. A todos ellos la vida les dio un pequeño empujón y los puso a prueba; creo que en ese momento sintieron que no era justo, pero hoy estoy seguro que saben que fue lo mejor que les pudo haber pasado. También tengo amigos que después de situaciones terribles se levantaron y se recuperaron o luchan a pulso por recuperarse. A todos ellos los admiro porque viven con pasión, porque cayeron pero se levantaron, porque salieron un asalto más.

A propósito de asaltos. En 1975 Joe Frazier y Muhammad Ali protagonizaron unas de las peleas más memorables en la historia del boxeo. Yo, sin ser un fanático de este deporte, encuentro un mensaje poderoso detrás de esa historia. A mitad de la pelea Ali se acercó a su esquina después de terminar el asalto y le dijo a su entrenador que no podía más, que tirara la toalla. Su entrenador, el legendario Angelo Dundee, le pidió que volviera al cuadrilátero y peleara uno más. Ali aceptó. Esta escena se repitió una y otra vez hasta que antes de salir para el último y definitivo, Ali ya sin fuerzas, le dijo a su entrenador que no iba a salir. Angelo le dijo lo siguiente: ¨sólo te pido un favor, camina hasta el centro del cuadrilátero y veamos qué sucede¨. Como pudo, Ali se incorporó tan sólo para darse cuenta que su rival no se levantaría de su silla. Después de coronarse ganador, Ali pronunciaría una frase lapidaria: ¨Nunca había estado tan cerca de la muerte.¨

Vivir la vida es una frase simple, casi obvia, pero representa eso que todos debemos hacer: expresar con pasión nuestra humanidad en cada segundo, en cada aliento, eso es vivir; no te quedes con la definición de diccionario que dice que vivir es existir. Dale sentido a tu tiempo en este mundo y vive.

Todo lo mejor en este fin de semana

Luis

Gracias a:

http://www.elheraldo.co/deportes/pelea-ali-vs-frazier-la-mas-memorable-en-la-historia-del-boxeo-19195

https://www.taringa.net/post/deportes/9988928/Muhammad-Ali-Vs-Joe-Frazier.html

desmotivaciones.es

Felipe Terán por enviarme un video de Juan Tonelli (https://youtu.be/nOvJ_FjOtWc)

10 comentarios sobre “Vivir la vida.

  1. Creo hoy estábamos un poco conectados! cuando no? … hoy antes de llegar a la oficina revise todas mis redes como es ya de costumbre y entre tanta publicaciones halle una frase que ahora ultimo va muy conmigo, te la comparto «A veces no hay próxima vez, a veces no hay segundas oportunidades, a veces es ahora o nunca» Bob Marley, y dije dentro de mi, si tiene razón, en muchas ocasiones damos segundas, terceras y miles oportunidades, nos convertimos tanto en rutina que como tu dices no nos percatamos de como llegamos a un lugar, y me pasa a menudo, tengo tan establecida mi ruta que cuando llevo a alguien mas y es de paso a mi lugar de destino, ni me percato que tengo que hacer una parada en un lugar diferente, dejamos pasar cosas maravillosas y momentos inolvidables por miedo, por enfocarnos en responsabilidades de otros, por pensar en los otros más de lo debido, que olvidamos eso que nos hace erizar, lo que nos mueve la fibra, lo que nos hace pensar «Dios, esto es lo que me emociona».
    Hay que ayudar, hay que pensar en el otro y siempre hacer lo que este a tu alcance para los que están a tu alrededor, porque eso vuelve a ti de una u otra manera, pero no podemos dejarnos a nosotros por eso. Ahora ultimo he sentido que soy capaz de Todo, y puede que sean un poco locas mis aventuras… pero te digo algo.. Me hacen vivir plenamente!
    Como dice la abuela, tu tio y tu pueden tener miedo o temor, pero de algo si estoy segura, son arriesgados… y si es verdad! nos arriesgamos, midiendo los riesgos, pero no poniéndonos barreras!

    Que tengas un Excelente Día!! y Vamos a vivir la Vida!

    Le gusta a 1 persona

  2. Y tú eres mi ejemplo de determinación y riesgo, nada es suficientemente fuerte ni grande como para que no te le midas. Admiro eso de ti. Sabes algo? Todo el universo está conectado y la información está disponible, sólo es cuestión de escuchar!
    Feliz fds

    Me gusta

  3. No hay peor error que el pensar que «llegará un mañana» en el que la vida será perfecta y tendremos lo que siempre quisimos. No me refiero a sueños y metas, creo que es en otro contexto. Me refiero a que muchas veces no vivimos nuestro presente, no disfrutamos de los momentos, de las personas, de los lugares, pensado en que llegará un mañana en le cuál si podremos hacerlo. He escuchado muchas veces frases como «Algun día seré feliz» , «Mañana lo hago» , «Tal vez ahora no es el momento», «Eso no es para mi», «No hay tiempo, dinero, etc»… y muchas más que justifican nuestra indecisión a vivir la vida en plenitud. Y es que la vida se trata de eso, de arriesgarse, de caer y levantarse las veces que sean necesarias, de dejar a un lado el miedo a ser juzgados y quitarnos tantos bloqueos mentales que nos han generado, creo que debemos ser nosotros mismos.
    Quiero contarte algo… creo que vivir sola, en un país el cuál es tan diferente al nuestro me ha enseñado tantas cosas, pero hay una que la practico siempre y es mi nuevo hobbie, siempre que tengo la oportunidad me voy sola a un Café, Cardiff tiene muchos y son una delicia, pido un Capuccino y me siento a disfrutar cada sorbo, su aroma, su color… será Colombiano? Italiano?… y me detengo a pensar por un momento en lo que he logrado y lo que me falta, o solo a disfrutar de una buena lectura, o simplemente a ver gente… nunca antes lo había hecho, pero me hace feliz sabes? son mis momentos conmigo misma y me han ayudado a darme cuenta de muchas cosas, como que la vida es tan corta y el tiempo pasa tan rápido que hay que disfrutar cada momento, de las personas que estan contigo, de los cambios, de las oportunidades, de los buenos y malos ratos, pero sobretodo a estar en paz y tranquilidad. La rutina nos aleja muchas veces de esos tiempo a solas y no nos permite pensar más a allá de lo que día a día hacemos, pienso que hay que buscar esos espacios, son maravillosos.

    Gracias por este post, me encanta leerte y compartir mis experiencias!!

    Me gusta

  4. Hola Anita
    Gracias por volver, siempre es un placer verte por acá. Importantísimo tener tiempo para nosotros y que sea de calidad, revisar lo que hemos hecho o simplemente dejarnos ir. A veces le damos toda la atención a los demás y nos olvidamos que necesitamos estar con nosotros mismos.
    Ese es un hobbie maravilloso disfrutar de una bebida en calma, en paz, apreciando nuestra existencia.
    Todo lo mejor y gracias de nuevo
    Luis

    Me gusta

  5. Hola! Muy buen texto el vivir la vida! Pienso que cada ser humano tiene su momento para sí mismo. Pero no se da cuenta que eso le sucede, no vive el momento por sencillo que sea. lo importante de ese instante único que nos ocurre todo el tiempo, al estar trabajando,estudiando,en una fiesta, viajando, viendo tele..o mejor aún cuando estás en el quirófano (que parece ya costumbre)y sientes unos minutos que estás ahí vivo y los cierras y luego abres los ojos y ahí estás vivo ! No importa si es bueno o no tanto es único estás allí y vives. No sé si me explico!!
    Como escribió Confucio; Tenemos dos Vidas: La segunda comienza cuando nos damos cuenta de que solo tenemos una! Les mando un abrazo Familia!

    Le gusta a 1 persona

    1. Hola Mary
      Gracias por volver!
      Me encantó esa frase de cierre y el mensaje que envías. Cuesta mucho darse cuenta y entender a qué fue que vinimos y siempre buscamos una razón para aplazar nuestros verdaderos planes pero creo que l vida siempre (o casi siempre) nos da esa segunda oportunidad
      Abrazo también
      Feliz semana

      Me gusta

  6. Yo la verdad no creo en las segundas oportunidades; así como el tiempo perdido, cuando dejamos pasar algo lo perdemos para siempre y no lo podemos recuperar; no solo porque es difícil que se nos vuelva a presentar; sino porque así suceda nunca será igual, nosotros no seremos los mismos y las circunstancias tampoco; así que si se da, será una nueva oportunidad, y una que quizás ya ni siquiera nos cautive tanto. Todo cambia y nosotros más. No nos interesa ni hacemos lo mismo que hacíamos hace 3 o 4 años y definitivamente no pensamos igual.

    Un ejemplo sencillo: algo que que yo siempre he querido hacer es asistir a una final de un deporte que me encanta, no lo practico, pero lo admiro; pude haber ido a una; pero cuando eso se presentó digamos que no era el mejor momento por otras circunstancias en mi vida; y decidí dejarlo pasar! Puede que más adelante se me presente otra vez la oportunidad de ir, pero las probabilidades de que la jueguen en el mismo lugar y los dos mismos contrincantes (uno de ellos mi segundo deportista más admirado) es muy baja, eso sin contar con que pueda que no coincida con mis posibilidades personales y en el mejor de los casos, contando con que todo se confabule para que sea así, ya no será la misma final! No me arrepiento y no sufro por eso, pero soy consciente de que quizás ya no lo voy a vivir.

    Cometemos el error imperdonable de pensar que siempre tendremos tiempo por delante, sabiendo de antemano que no hay nada más incierto. Hacemos planes, soñamos, pero lo hacemos a futuro y postergamos todo; Somos expertos en dejar para después! Y nos excusamos en un montón de pretextos para no actuar; posponemos proyectos porque nunca creemos estar preparados. Aplazamos estar mas con los que queremos porque siempre hace falta algo.

    Es cierto, desperdiciamos nuestro tiempo y con esto gran parte de nuestra vida en cosas innecesarias, y dándole prioridad a lo equivocado. Condicionamos tanto nuestro bienestar que siempre esperamos obtener más y nunca realmente disfrutamos nuestro presente. Todo eso pese a que los mejores momentos de nuestra vida no requieren mayor cosa, porque no tienen nada que ver con lo que tengamos; las memorias mas lindas dependen esencialmente de lo bien que nos hemos sentido y con quien las hemos compartido. También son las metas logradas; y toda aquella situación donde fuimos excepcionales.

    Es verdad que cada decisión que tomamos y en especial las que dejamos pasar tienen sus consecuencias; pero lo cierto es que no podemos vivir arrepentidos; si no se dio por algo fue. Y debemos aferrarnos a esos motivos por los cuales elegimos el no, seguir adelante y tratar de sacarle el mayor provecho a lo que decidimos.

    Así no tengamos todo lo que creemos necesitar, tenemos la suficiencia de sentirnos bien, podemos beneficiarnos de lo que nos rodea, basta con detenerse, con observar, con abrirse para ver las maravillas que existen a nuestro alrededor y que están expresadas de tantas formas y en tantas cosas; lo vemos en la naturaleza en todo su esplendor; pero especialmente lo encontramos en la gente; en sus talentos, en sus dones, en su bondad y en sus infinitas capacidades.
    Dejamos pasar cosas increíbles por no darle la importancia necesaria a los detalles, porque vivimos ocupados y tenemos otras cosas en la cabeza, porque damos todo por sentado, y no tenemos en cuenta el efecto tan positivo que muchas de esas cosas nos ofrecen y lo que pueden trasmitirnos, hay que dejarse contagiar de lo bueno, de lo hermoso, de lo extraordinario.

    Dejemos de enfocarnos en lo negativo, de quejarnos por cualquier cosa y de vivir anhelando lo que no tenemos. Tendemos a dejarnos amargar por detalles muy pequeños; La mayoría de cosas que nos irritan, son momentáneas y se solucionan rápido. Los contratiempos existen, y todos cometemos equivocaciones; pero mientras no hagamos un daño mayor, eso no debería tener el poder de alterarnos. Está en nosotros la opción de cambiar y con determinación hacer una diferencia brindándole a los demás lo bueno de nosotros y no la mala cara; no hay nada que desarme más a una mala actitud que una buena; no hablo de fingir lo que no sentimos, sin duda seguirán existiendo situaciones difíciles a las que no podremos reaccionar con sonrisas; pero podemos asegurarnos de que lo que nos altere valga realmente la pena. Esto no será algo que asegure nuestra felicidad ni haga mejor al mundo, pero seguro que si mejorará nuestra manera de sentirnos con nosotros mismos y también de interrelacionarnos con los que nos rodean.

    No nos quedemos viviendo en el pasado y tampoco «organizando» todo para el futuro, vivamos el presente, disfrutando de lo que se tiene y lo que se siente ! pensemos dos veces (o las que sean necesarias) antes de dejar pasar una oportunidad; pero luego de que decidamos ya no lo hagamos más ! El arrepentimiento no ayuda para nada; actuemos, incluso para fracasar, pero haciendo algo; vivamos! conservemos los momentos felices en nuestra memoria no con nostalgia, sino para traerlos cuando los necesitemos y dediquémonos a crear más de estos, veamos más allá de lo inmediato y con ojos generosos, cerremos la puerta lo más posible a lo negativo y actuemos de corazón, eso siempre dará buenos resultados.

    Aveces puedo tener esos momentos de lucidez donde siento, donde vivo, donde se manifiesta lo trascendental en mí y puedo experimentar esa magia de poder sentir tantas cosas, donde me dejo sorprender y me doy cuenta lo afortunada que soy por estar viva, por amarme a mí misma, por tener la fortuna de poder dar amor y también recibirlo y haciéndolo soy feliz ! Me gustaría que fueran más, pero ahí vamos trabajando en eso. Y no sé si este texto sirva en realidad para algo; pero me animé a compartirlo.

    Creo que pude sonar un poco «demasiado positiva» o soñadora para una realidad que puede ser muy complicada, y que se encarga de retarnos de múltiples maneras; pero he estado en ambos lados de la balanza; me han pasado cosas muy difíciles y tristes, pero también otras muy hermosas e increíbles; he sentido la derrota, y decidí estar mejor, (no solo por mi). Aunque estoy convencida de que vienen cosas buenas, no descarto que un día la vida vuelva a golpearme, pero con seguridad voy a estar mejor preparada. Sino al menos tendré la certeza de haber disfrutado montones y contando en mi haber con muchos más «mejores» momentos.

    Gracias Luis por esta nueva entrada que se me presenta como una nueva oportunidad 🤗!

    Le gusta a 1 persona

  7. Hola Mía
    Gracias por tu comentario.
    Claro qué hay cosas puntuales que no se repiten en la vida como la respiración, cada aliento es diferente e irrepetible pero creo que las oportunidades son cosas más generales; la oportunidad de ir a Europa, una segunda oportunidad en la vida para amar o incluso ir a una final.
    Me gusta ver tu positivismo y la claridad con la que defines el proceso que sigues, conocerse es el primer paso para desarrollar lo que necesitamos mejorar. No te veo soñadora, te veo bien encaminada
    Muchas gracias por volver y por tus comentarios
    Todo lo mejor
    Luis

    Me gusta

Deja un comentario